sábado, 1 de diciembre de 2012

DE LA AUSENCIA

 
DE LA AUSENCIA
 
No es que te haya faltado, vida mía,
un poco más de miel en cada beso
ni verte cura más cuando, ex profeso,
el cuerpo un mar de lágrimas envía.
 
No es que siendo más libre, por sombría
la noche me volviera un lobo preso,
no ha sido de tu falta por exceso,
que hoy me mata a traición tu compañía.
 
Pregúntale al santón, al delincuente
que el alma habita alado en carne y hueso
guardián de mi pasado y mi presente,
 
que tiene voz y voto, y libre acceso
a ese nicho secreto de la mente
donde escondo el amor que no confieso.
 
TADEO

2 comentarios:

Dulce dijo...

Como da forma a los sentimientos, me deja embriagada de éxtasis poético... Es un amor...

JOSÉ TADEO TÁPANES ZERQUERA dijo...

Gracias, Dulce por tan hermoso comentario. Me da mucho placer saber que estos versos han tocado tu sensibilidad. Besitos:
Tadeo