CEGADOS
POR LA SED
Cegados
por la sed los dioses mancos
perdieron
en el fuego las castañas
y
duermen con el miedo en las entrañas
los
negros, los mestizos y los blancos.
Se
esconden tras la puerta de los bancos
astutos
como sucias alimañas,
autores
de esas dádivas extrañas
que
empujan vida y sueño a los barrancos.
A
oscuras van los hombres y el sistema
les
dice con espíritu triunfante:
invierta
su esperanza en mí, no tema,
lo
triste es un mal sueño, es un instante,
haciéndoles
creer que está distante
el
tiempo del diluvio o de la quema.
TADEO
2 comentarios:
Qué triste realidad tener que acabar durmiendo aguardadso de los desahuciadores... Será un consuelo, triste consuelo creer que tendrán su juicio? o será que los que sufren el desahucio ya están siendo castigados? Muy de nuestros dias, este tema, amigo señor Tápanes. Un buen trabajo, felicidades.
Gracias, Alfonso, por tus palabras. Son temas difíciles que rara vez asoman por mis versos, pero no quiero que dentro de 500 años, si el planeta llega allá y mis versos también, que digan que en ningún caso reflejé la realidad social de mi tiempo, jejeje. Así que ahí queda. Un abrazo.
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