lunes, 22 de octubre de 2012

TÚ QUE VIENES Y VAS

 
TÚ QUE VIENES Y VAS
 
Tú que vienes y vas de tanto en tanto
como el rayo de luz de mi desvelo,
y prendes las hogueras o eres hielo
y causa de mi risa y de mi llanto.
 
Tú que me haces, demonio, ser un santo
y casto en mi oración subir al cielo
o vienes con olores de hembra en celo
a encerrarte en mi cuerpo a cal y canto.
 
Ni un alma hubo jamás que no muriera
clavando en cada tumba, en cada trono,
las manos y los pies a la madera.
 
Disculpa si al dudar te decepciono
pero atado a la cruz del que te espera,
ni me perdona Dios, ni me perdono.
 
TADEO

2 comentarios:

Río al mar dijo...

Bellísimos estos encuentros de fugacidad... Un placer. Saludos desde el cauce

JOSÉ TADEO TÁPANES ZERQUERA dijo...

Gracias, Río al mar, como siempre un placer tener la suerte de compartir mis versos con personas hermosas como tú. Un abrazo:
Tadeo