domingo, 8 de julio de 2012

LÁGRIMAS


LÁGRIMAS

Jamás el fuego de tus ojos tanto
brilló con la imprudencia de una estrella
al final de la impúdica querella
que puso entre los dos un mar de llanto.

Diabólica obsesión de hacerme santo
de ser en tu ilusión el que descuella
dejando a flor de piel mi oscura huella
y el mármol con la cruz del desencanto.

El salto de la angustia en tu mirada
al irse mi garganta de sus nudos,
fue toda tu respuesta y la cascada

silente de tus dardos puntiagudos
dejaron a mi piel acribillada
en medio del fragor de los desnudos.

TADEO

2 comentarios:

Sofia Cor dijo...

Muy bellas letras, amigo poeta.

JOSÉ TADEO TÁPANES ZERQUERA dijo...

Gracias, Sofía Cor por tus palabras. Un placer compartir contigo mis versos. Besitos.
Tadeo