UN
AÑO ATRÁS
Un
año atrás, muchacha, te lo advierto,
donde
ves dibujada esta sonrisa
hubieras
encontrado en tu pesquisa
más
que un loco de atar, un hombre muerto.
Un año atrás, imberbe e inexperto,
la lágrima en mis ojos indecisa,
hubiera atravesado la camisa
pintando un lago triste en mi desierto.
Yo soy la nube gris que se divierte
perdido en la humedad de un viento amargo
buscando movimiento en cielo inerte.
No quiero que supongas, sin embargo,
que libre estás de culpas, cuando a muerte
jugamos al amor un llanto largo.
TADEO
2 comentarios:
Excelente, amigo. El tiempo es quien pone las palabras, quien cura heridas y quien hace brotar nuevas lágrimas. Un abrazo
Gracias, Alfonso, por tus palabras. Me alegra que estos versos te hayan gustado. Un abrazo:
Tadeo
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