VISIÓN SAGRADA
Entre el espejo y la inquietante lumbre
desnuda cruza la visión sagrada
y el monje con los hábitos se enfada
a pesar de su santa mansedumbre.
Sin dejar que a la gracia se acostumbre
lo que hay de pecador en su mirada,
los ojos ha entornado cual cruzada
de abismal contrición en certidumbre.
Con la frente pegada contra el muro
escucha del demonio su consejo
como un canto de amor, como un conjuro,
invitándole a ver en el espejo
para a salvo quedar del lado oscuro,
no la visión carnal, sino el reflejo.
TADEO
2 comentarios:
Un sueño muy especial, ver atravesar la imágen sagrada del amor santo y materializarlo. Bellísimo
Gracias, Sofía, por dejarme tus bellas palabras en estos versos. Besitos:
Tadeo
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