LENGUAS DE FUEGO
Las lenguas, de la muerte, son testigos.
Al fuego van, el brujo, la hechicera,
y el verdugo, en el centro de la hoguera,
los ata como a dioses enemigos.
Abajo están los nobles, los mendigos,
la Santa Inquisición, la Santa Fiera,
queriendo, entre las brasas, que se muera
el mal, con toda suerte de castigos.
Jesús baja del cielo en una nube,
divina compasión que se derrama,
el humo es Satanás ardiendo, y sube
del centro de la plaza, Dios los llama
y nombra serafín, después, querube,
al alma del varón y de la dama.
TADEO
2 comentarios:
¡Magnífico, Tadeo! El único fuego que veo en tus versos es el arrollador impulso de la creación que se hace uno con tu pluma. No hay tema, circunstancia o tiempo que no se convierta en un maravilloso soneto en tus manos.
Un beso enorme querido amigo.
Querida Liliana:
Muchas gracias por tus palabras. Qué bueno verte por mis versos. Te deseo todo lo mejor y que el fuego purificador de Dios te libre de todo mal. Besitos:
Tadeo
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