CUPIDO
Un ángel vi que desde el cielo mira
con los sueños alados, con la mente
brillante y expandida, un ser viviente
que ni duerme, ni come, ni respira.
Un ángel que detecta la mentira
humana, y la verdad omnipotente
lo anima a perdonar el bien ausente
y el mal que alguna vez amor inspira.
Un ángel celestial, por Dios ungido,
flamígero, inmortal, de la cosecha
eterna, que dispara, sin sentido,
al mundo, despertando la sospecha
del hombre y la mujer que se han unido
por culpa del impacto de una flecha.
TADEO
2 comentarios:
Precioso Cupído. Besos
Gracias, Ángela, por pasar y dejar tu huella en mis versos. Besitos:
Tadeo
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